POLÍTICOS SIN ESCRÚPULOS: EL PARTIDO POPULAR MURCIANO BOICOTEA LA LEY DE DEPENDENCIA

Cuando uno lee en prensa ciertas noticias es difícil tomar distancia y no afectarse por ciertos movimientos políticos más propios de gansters sin alma que de seres humanos con sentimientos. Y si además uno observa con perplejidad e indignación como esos políticuchos incompetentes y despreciables son premiados y jaleados por una ciudadanía congelada y secuestrada por el efecto de las tretas de esos mismos impresentables, aquellos que un día juraron sus cargos prometiendo honestidad, la indignación crece hasta poner la sistólica por las nubes. La clase dirigente, que no es infalible, suele ofrecernos botones como muestra en forma de pistas, algunas veces sútiles y otras evidentes, de su incapacidad personal y técnica para desempeñar sus funciones. Hay que estar vigilantes a riesgo de que nos tomen la medida y el pelo.

El caso más sangrante y escándaloso de desvergüenza política es el de la nula aplicación de la Ley de Dependencia en comunidades gobernadas por el Partido Popular, en concreto hablamos de Madrid y Murcia, campeonas de la insurrección política. Cuando no es contra la ley del tábaco es por las normativas forestales, y si hace falta, hasta reventamos las desaladoras en curso, que total, el discurso del agua también tiene sus "bujeros negros". Lo que me costaba imaginar era que Aguirre y Valcárcel llegaran tan lejos y se atrevieran a jugar con la salud y el bienestar de sus respectivos conciudadanos. Llaménme inocente, no me lo esperaba. Aunque no confie en el político, siempre confío en que detrás hay una persona. Me equivoqué.

Que el ministro Caldera tenga que denunciar públicamente que Madrid y Murcia son las únicas comunidades que "no están haciendo nada" por aplicar la Ley de Dependencia supone una llamada al orden sonrojante a nuestro gobierno regional, empeñado en un boicot barriobajero que afectará a las numerosas familias en una situación desesperada por dependencia en nuestra Región. No es que se haga poco o se pueda hacer más, es que no hacen nada, no mueven un dedo según denuncia el ministro. Es un insulto, un escupitajo, una bofetada, una ofensa al pueblo murciano curtida desde el Palacio de San Esteban y la consejería de turno. ¿A nadie se le remueven las entrañas?

Según Caldera, "la inmensa mayoría de las comunidades autónomas está cumpliendo" con su parte del trato a excepción de Madrid y Murcia, dos de las regiones, resaltó, gobernadas por el PP, a cuyas autoridades achaca por no llegar a consensos, el retraso en la aplicación de la Ley de Dependencia en sus territorios. Según el ministro, su actitud se debe a la "falta de lealtad" con el Gobierno del país que sólo perjudica a los ciudadanos. Y tiene razón, aunque sea socialista, tiene razón. Son muchas las voces en esta Región, desde la oposición política a colectivos ciudadanos, que vienen denunciando la actitud del gobierno regional a la hora de tramitar y gestionar ayudas a la dependencia. A nadie que siga la actualidad le ha pillado por sorpresa esta última zancadilla a los murcianos, que no al gobierno central como ellos andan buscando. ¡Pero qué poca categoría humana y política tienen nuestros dirigentes regionales!

Y así, mientras el resto de comunidades van a recibir cuantiosos fondos para atender a sus ciudadanos dependientes, los señoritos feudales que gobiernan Madrid y Murcia entienden que es más rentable la bronca política al bienestar del enfermo de Alzheimer que lleva de cabeza a sus hijas o al enfermo de esclerosis que malvive sin el apoyo de la administración a costa de la salud y el esfuerzo titánico de sus familiares. Y luego dicen defender la "España igual para todos", ¿serán caraduras? Señor Rajoy, gracias a sus presidentes regionales, el murciano dependiente no tiene las mismas oportunidades que el andaluz dependiente. ¿Nada qué decir? Nada le conmueve ya a estos caballeros del agua, salvadores de la patria y reyes de su única ideología, la mentira, el dinero y el poder. Que toda una sociedad no reaccione a este tipo de boicots, por evidentes, dice mucho y malo de la dignidad de miles de ciudadanos. O están desinformados, que es lo que quiero pensar, o son tan canallas como los dirigentes que votan y revotan en sucesivas elecciones. Habrá de todo dirán. Sí, pero sigo sin conformarme con que me tomen el pelo y se enjuaguen con la dignidad de mis vecinos y amigos. ¿Dónde tenemos escondido el orgullo?

Y voy más lejos. Las ganas de vomitar me embargan cuando tomo conciencia de que la cabeza pensante de tal estrategia es el señor Valcárcel escudado de nuevo en su mano ejecutora preferida, el señor Bascuñana, salvado por la campana del escándalo de La Zerrichera cuando fue enviado a la consejería de Asuntos Sociales para tratar de despistar a su señoría, sin perder el aforo que es el seguro. Estos impresentables están igual firmandote la recalificación de un paraje natural que firmando ayudas a ONG´s de dudosa procedencia. ¡Qué miedo dan! Benditos seamos los murcianos que tragamos con que este sinvergüenza reconocido (y no lo digo yo, son muchos los que han topado con él desde que entró en política) gestione tan nefastamente y con tan poco contenido en sus visceras los destinos de nuestros dependientes. En cualquier sociedad que se precie, abierta, plural, sana, mañana habría concentraciones en la consejería para pedir la dimisión de este señor, o, en su defecto, en el Palacio de Justicia para que agilicen los procesos judiciales que amenazan con tragarse el orgullo patrio de este murciano de hojalata.

Pero nos han comido la moral, aquí no pasa nada, nadie se conmueve ni se indigna, y si lo hace en público ciudado porque lo tacharan de rojo, catalán o antimurciano, "gaste esas energías en pedir agua a Cataluña" le dirán. Y es que nos han anulado con sus maniobras electorales barriobajeras, con la utilización malsana de los sentimientos para manipularnos, con la calumnia y la mentira, con la huida hacia delante, con la conspiración en favor de los poderes fácticos que les respaldan. Tienen el dinero para pagar campañas de manipulación informativa, para crear sloganes que pagamos todos, para vendernos la moto con poderosas técnicas de persuasión importadas de la administración Bush, infundandonos miedo, desconfianza, apuntando a nuestra identidad y a nuestra autoestima como pueblo. Han conseguido que salgamos a la calle para pedir agua, para enfrentarnos con el gobierno central, para vocear a Cataluña o a Aragón, para crispar, para servir a los intereses del cacique y del político sin escrúpulos en base a razonamientos trogloditas y fascistas propios de sociedades aún sin civilizar, salidas de tono que nos han procurado el desprestigio en toda España de norte a sur y de este a oeste.

Han conseguido que perdamos el hilo de la información, que leamos solos los medios de comunicación que financian con su corrupto dinero, que cerremos la puerta a la racionalidad y que nos movamos por impulsos de visceralidad y victimismo en torno al nacionalismo hidráulico que tantos votos les han procurado y tan malos resultados nos ha reportado a los habitantes de esta Región. Han conseguido que no nos indignemos con la corrupción, que no nos conmueva la destrucción de nuestros espacios naturales, que no valoremos leyes como la dependencia o igualdad, que no reconozcamos que aunque seguimos siendo una región sin mucha influencia hoy se invierte mucho más en esta tierra que cuando gobernaba aquel señor bajito de mal humor que se negaba a recibir a nuestro presidente Valcárcel y que consiguió la épica de poner dos piedras para inaugurar un proyecto que él sabía inviable por bloqueado en Bruselas.

Nos han dejado sin sangre de tanto chuparla pero se ve que nos gusta. Nos abofetean y les sonreimos "gracias". Porque han aprendido que no hay mejor manera de poder hacer y deshacer sus negocios complices con los especuladores que traslandando el foco de nuestra atención al señor Carod Rovira o al terrorista Iñaki De Juana Chaos. Lo demás no importa y si algo sale mal, los murcianos sabemos que la culpa no es de los que gobiernan aquí, que en algún lugar de nuestra geografía (preferentemente donde gobierna el PSOE) está el origen de nuestra sequía, de nuestros sueldos, de nuestras deficientes infraestructuras. Estamos lobotomizados hasta un punto que nuestro sentido crítico ha sido anulado para gozo y satisfacción de empresarios corruptos, constructores despiadados y politicuchos asociados. Si ayer nombran a un imputado por La Zerrichera gerente de urbanismo en Lorca no pasa nada. Si detienen una asociación de ayuda al inmigrante "alegal" que hacía de vocera aventajada del gobierno Valcárcel asustando a nuestros queridos inmigrantes "sin el Ebro habrá paro", tampoco pasa nada; aunque recibiesen más dinero que Caritas y Jesús Abandonado y otras asociaciones del mismo palo no les reconozcan su actividad, a nadie se le ocurrirá mirar a San Esteban o a La Glorieta. Eso sí, estaremos bien atentos a la próxima metida de pata de Carod Rovira o a si Maragall bebe una o dos copas de vino. Así estamos.

No pasa nada señores murcianos. Mañana recibiremos al corrupto o al pederasta con aplausos, champagne y caviar y nos quedaremos con la conciencia tranquila atizandole al Zapatero de turno. Lo importante es el agua, pero agua del Ebro, que de otra manera "no se vale". Hasta ahí llegamos. Ni la sanidad, ni la seguridad, ni el medio ambiente, ni siquiera la educación. Esa es la pena que me corroe. Porque una sociedad desinformada es una sociedad muerta, carne de cañón que aprovecha el poder fáctico y económico para rebosar sus cuentas corrientes a costa del sudor de los trabajadores. Seguimos con los sueldos más bajos, con las pensiones más bajas, con la mayor precariedad, con la vivienda menos accesible, con el mayor fracaso escolar, con boicots a las desaladoras, a la ley de dependencia, etc. Y nos gusta, nos gusta tanto que pedimos más y más, fragelándonos como el marbellí de pro, poniéndole la alfombra al Gil de turno. Y vale, ya sabemos de que pie cojean los Valcárcel, Bascuñana y compañía, y lo que queda por conocer en los juzgados. Pero, ¿y nosotros? ¿Somos mucho más dignos que ellos? Tenemos unos políticos que nos representan muy bien. No se trata de votar a otro partido político, no se confundan, esto no es un canto hacia ninguna opción alternativa. Estoy seguro de que el PP tiene mejores políticos, mejores candidatos, mejores personas para ejercer este tipo de responsabilidades. Están ahí, son críticos, saben que no se están haciendo las cosas bien, pero no tienen ninguna fuerza porque nosotros se la damos con los ojos cerrados a quienes no la merecen.

Nos encanta que nos regalen los oídos con mentiras, que nos unan en torno al lamento barato, que menoscaben nuestra autoestima colectiva, que nos tomen el pelo, que se mercadee con nuestro patrimonio. Nos chiflan los atascos, los tranvías de juguete, los campos de golf, el cemento para todos, el pelotazo fácil, Marina Cope, el dinero negro. Hemos perdido nuestros principios, nuestra dignidad como pueblo y no parece que la vayamos a recuperar. Nos hemos vendido y lo peor es que nos hemos vendido muy baratos. Nos han comprado con dos cuñas y dos puñeteras manifestaciones. Cobramos igual, vivimos igual, estamos igual, cuando no peor. Crecen las diferencias entre ricos y pobres y nos preguntamos asombrados cómo puede ser eso, ¿será por culpa de la derogación del trasvase del Ebro? Algunos se han montado demasiado bien y otros están pagando la broma, en algunos casos con hipotecas a 40 años, pero eso no nos intriga ni nos moviliza. Nos convergemos ni con Europa ni con España pero estamos encantados con nosotros mismos.

Ya solo falta que vengan los voceros Garre y Ayala a hervirnos la sangre con sus mentiras. Están al caer. Dirán que Zapatero nos da tren de la bruja por AVE aunque la realidad de los hechos demuestre, y ahí están las hemerotecas, que está en marcha nada más y nada menos que el proyecto que firmó Valcárcel en 2001. A ellos les da igual, por 10 minutos más de trayecto y a 5 meses de las elecciones, vale la pena desdecirse, negar sus actos y sus palabras aunque eso suponga retrasar la llegada del AVE 4 o 5 años más. ¡Cuanto peor, mejor! Ayala, que es un listo, es un maestro creando escuela y secta. Pero llegará Garre y le pondrá el título difícil con el discurso de la delincuencia. A él también le da igual que se le demuestre con datos que con Aznar en el gobierno perdimos Policia y Guardia Civil a porrilo y que ahora gracias al demonio ZP tenemos plantillas reforzadas e incluso recibimos unidades especiales de la benemérita. Nosotros creemos ciegamente a estos personajes. Si tan solo estudiáramos su pasado y su recorrido saldríamos corriendo. Pero nos encanta que nos tomen el pelo. Pero el problema no son ellos. Somos nosotros.

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