DE CONSPIRACIONES, GOLPES DE ESTADO Y TRAIDORES: UNAS HIPÓTESIS GENOVESAS.

















11 DE MARZO DEL 2004.

Son las 9 de la mañana. Varios atentados terroristas sacuden Madrid y dejan a su paso decenas de muertos y miles de heridos. El país está en choc; bueno, no todo el país, resiste impasible un grupo de "progres" en una pequeña sede de la calle de Ferraz, donde los asesores de la campaña electoral del candidato Jose Luis Rodríguez Zapatero trabajan a destajo desde que se hicieron públicas las primeras explosiones. La sede del PSOE echa humo. No hay lágrimas, ni pena, sino hombres duros dispuestos a poner en marcha toda la maquinaria para llevar a su candidato a lo más alto, a la Moncloa.

Por los pasillos de Ferraz se encuentran Rubalcaba y Blanco; el primero sonríe y le dice a Pepiño "esta es la nuestra, pon en marcha el Plan Especial de Desarrollo de Golpes de Estado que todavía guardamos en el despacho de Vera". Blanco asintió y agarró del hombro cariñosamente a Rubalcaba, "en tres días si Pablo Iglesias quiere, volveremos al poder". Todo son prisas. Los asesores de imagen de Zapatero instan a este a que en rueda de prensa acuse a ETA del atentado; le piden que salga con cara compunjida y demacrada. El candidato está feliz porque el "plan B" está en marcha. No le importan los muertos, porque todos sabemos que además de extraterrestre es una mala persona, un desalmado y un antiespañol. Pronto empezará a dar frutos su siniestro plan de presentarse a unas elecciones generales para una vez en el poder, destruir España y darle la independencia a su verdadera patria, Cataluña, su sueño desde niño.

La rueda de prensa suena convincente. Ahora hay que mover los hilos y hacer unas cuantas llamadas a las cloacas. "Ponganme con el subterraneo de la sede", dijo enérgico Zapatero. El Plan B consistía, evidentemente, en movilizar a los antiguos servidores de la causa socialista, aquellos oscuros pero eficientes personajes que desarrollaron el G.A.L. Rubalcaba mientras tanto hacía una llamada al bar de enfrente "súbanme una botella de Moet Chandon", pero Pepe Blanco, que siempre tiene que tener la última palabra le hace una señal "que sean dos, que esto va a ser divertido". Por los pasillos corría Carme Chacón en sujetador en medio de risas y por megafonía se podía escuchar una canción machacona "tú lo que quieres es que te coma el tigre, que te coma el tigre". Ambiente festivo mientras España lloraba. Deshinbición total, Zerolo tirándole los trastos a Lopez Aguilar, Lopez Garrido coqueteando con la Trujillo, etc...se veían ya en el gobierno.

Todo se pone en marcha. No paran de llegar diputados y altos cargos socialistas a la sede, que se unen a la fiesta mientras las 4 cabezas pensantes desarrollaban el "golpe de Estado". El ex-presidente Gonzalez llegó de los últimos pero con una sonrisa de oreja a oreja, él no podía faltar. "Esos fascistas del PP se van a enterar de quien soy yo". Jose Luis se funde en un abrazo con él, "gracias por venir mi furher". Todo estaba planeado. El objetivo era engañar a la opinión pública, encubriendo en las investigaciones venideras, cualquier pista que señalara a la verdadera autoría, ETA, y apuntar con la ayuda de los S.S.S. (Servicios Secretos Socialistas) a la autoría islamista para que los ciudadanos, que son unos primos, relacionasen el atentado con la guerra de Irak.

"Brillante" dijo Gonzalez, "ni a Barrionuevo se le hubiese ocurrido". Los teléfonos echaban humo. Rubalcaba se ha bebido ya, en un alarde de optimismo, media botella. Zapatero habla con Aznar por telefono y le dice que está con él para lo que haga falta. Poco le importaba al PSOE, un partido amigo de los terroristas y los maricones, que el PP, que es un partido honrado, honesto y cabal, quedase en mal lugar. Todos sabemos que existe el llamado "gen sociata" que lleva a sus portadores a querer sentarse "en el sillón" por encima de todo. Es un gen curioso, por cuanto por ejemplo los populares, jamás harían cualquier cosa por llegar al poder, menos aún, mentir a los españoles, algo que su fé católica y apostólica criminaliza, porque los que dicen mentirijillas van al infierno.

Acebes en rueda de prensa. Se le nota muy mal, a diferencia de los socialistas, que están felices y trabajando por la destrucción de España. Apunta a la autoría de ETA. Lo que no sabía este santo llamado Angel, es que Rubalcaba, ya había ordenado a gente de su confianza que manipulara las pruebas, entre ellas el Renault Kangoo, que se llenó de objetos de todo a cien y del sex-shop más cercano y de una cinta comprada en uno de sus muchos viajes a Tanger; también los restos de explosivo en los trenes, en origen titadyne, y que fueron recogidos con escopa y cambiados por coca pura mezclada con pintura de roja (de buena marca, que cuando se ponen, estos "progres" se portan). Zapatero seguía haciendo el paripé pero no tocaba aún mostrarse contrario a las informaciones del PP.

Aznar llama a los medios de comunicación. Poco antes, Pedro Arriola, Zaplana (qué gran hombre este) y él habían hablado sobre las consecuencias del atentado. "Tenemos que decirles la verdad, aunque duela, como hicimos sobre Irak, el Prestige y el Yak". Y así fue. El PSOE, a instancia de las S.S.S, se ponía en contacto con mandos de la Policia Nacional y la Guardia Civil. Había que empezar a despistar. Todos los cargos de confianza nombrados por Acebes fueron comprados en voluntad y hecho. Cada uno recibiría un piso en Seseña y unas participaciones en una sociedad mercantíl marbellí. No pudieron decir que no. Su labor, confundir al santurrón de Acebes para que, en un par de días, Rubalcaba, ya recuperado del coma etílico, sacara los colores al honrado Aznar y al impoluto Zaplana.

La maldad del antiespañol Zapatero y de su miniyó Caldera no tenía límites. Aceptaron manifestarse junto a Aznar contra el terrorismo. "Jefe, pero si todo el mundo sabe que somos amigos de los terroristas", dijo Caldera. "Ya, pero la gente es tonta Jesús, si tragan con Crónicas Marcianas tragan con esto fijo". Caldera levantó la mirada, sonrío, y espetó "presidente, cuando lleguemos al poder, sé cómo podemos acelerar nuestro plan de destrucción macho-ibérica". "Sueltalo ya Jesús, no te hagas de rogar". "Me dejarás regularizar a todos los moricos que nos dejó Aznar (en un despiste, ojo) para primero darles derecho a voto y después alistarlos en nuestras Hordas AntiEspañolistas?". "A veces eres brillante", dijo Jose Luis. En efecto, el Plan era dejar el "camino" libre a Mohamed para convertir a España en un país islamista. Una invasión marroquí de dentro afuera, ni al estratega Franco se le hubiese ocurrido mejor.

Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado eran pues, dirigidas en la sombra por la sede de Ferraz. Todos cumplieron la orden, había sido AlQaeda. Los especialistas y hackers informáticos del PSOE lanzaron el bulo a la red. El resto, cosa de D. Jesús Polanco. La Ser iba a ser el aparato de propaganda y acoso y derribo de Rajoy, para no desgastar al candidato Zapatero. Suena el telefono, es Otegui. "¿Está Pepe Luis?", "si espera Arnaldo, se pone, por cierto, esta mañana lo has bordao, contad con la autodeterminación machote", dijo Pepiño Blanco. Se pone Zapatero, "hola etarrita de mis amores, buen trabajo esta mañana, nos hemos cargado ya a 191 españoles, ya nos quedan algo menos de 40 millones por quitarnos de enmedio", Otegui responde "todo se andará, mis chicos están entrenando en la cárcel para cuando los sueltes, sembrar el terror". "Bien, vosotros seguid negando que habeis sido que supongo que en menos de un año empezaremos a negociar la rendición de España ante ETA", dijo el que iba a ser conocido como zETAp. Zapatero tenía mucha fé en el mundo abertzale. Y Arnaldo a su vez en el PSOE. Antaño enemigos, hoy, compañeros de tarea.

Acebes salía en rueda de prensa, el hombre con tanta voluntad e inocencia como siempre, pero La Ser había hecho mella en la población. La honrosa labor de medios impolutos, decentes y patrióticos como La Cope o El Mundo, no pudo hacer nada frente al terrorista de las ondas Polancone. La última fase estaba a punto de comenzar. Mensajes por doquier para manipular a la gente y enfrentarlos al gobierno. Los españoles, conocidos analfabetos e incultos, cayeron en la trampa. Los 8 años de Aznar no fueron suficientes para suplir la decadencia educativa de los años socialistas. Las generaciones de la Logse se lanzaron a la calle llamándo mentirosos a los populares, algo que a todos luces nunca ha sido cierto, a los hechos nos remitimos. La Dirección de la Policía llama a Ferraz, "Jose Luis, todo hecho, ya sabes, queremos aumento de sueldo y lo pactado, no nos falles". Ese lema se hizo famoso pocos días después, pero nadie sabe donde se originó realmente. El PP estaba quedando muy mal y Rubalcaba remató en aquella famosa rueda de prensa. Esa noche cuentan que corrió el cava catalán y el confeti en la sede socialista. Carod Rovira llegó de madrugada de la mano de Maragall. "Nosotros también queremos participar de esta orgía", dijeron a la entrada.

14-M, Zapatero es el nuevo presidente del gobierno. El G.A.L ha triunfado, esta vez sí. Habían aprendido de los errores del pasado. Los terminaitors socialistas habían conseguido su objetivo. La destrucción de España se ponía en marcha. Solo quedaba terminar de manchar el honor de personajes como Losantos, Pedro Jota o Del Burgo que no cesarían de buscar la verdad de todo. Cataluña sería el centro de operaciones. España, se empezaba a romper. El Golpe de Estado, había triunfado.


Ahora en serio. A mí no me han pagado por contaros la guerra civil socialista ni trabajo para el periodismo de investigación que salvará la patria. Es tan absurdo lo que el PP, EL MUNDO y La Cope quieren que nos creamos que, de tanta pena que dan ya dan asco. No les importan los muertos, ni la verdad, ni el Estado de Derecho, nunca les ha importado. Solo el voto, el voto, y el voto. Justo de lo que acusan a los demás. Eso se llama "proyectar".

Pasan por encima de jueces, policias, guardias civiles, fiscales, los acusan de conspirar, lo que haga falta, ellos son "la verdad". Debería caerseles la cara de verguenza. De entre muchas cosas, aquellos días me sentí especialmente orgulloso de ser español; me sentí orgulloso de nuestra policía, de nuestros sanitarios, de nuestros vecinos, de toda la sociedad española.

Solo un gobierno mentiroso sin escrúpulos desentonó. Pero los ciudaanos, esos mismos ciudadanos que se comportaron con honor y verdadero patriotismo, los echaron legítimamente del poder y volverían a hacerlo hoy sin duda. Se están haciendo de oro unos inconscientes desalmados que son capaces de aventurar que los socialistas son personas sin sentimientos, capaces de montar en dos horas un golpe que ni Robert Refford y que viven en nupcias con terroristas que han sesgado la vida de decenas de queridos compañeros.

Teorías enfermizas de personas enfermas que solo buscan el dinero y el poder. Que les vayan dando por culo, así de claro. En las próximas elecciones, hablaremos nosotros y los pondremos en su lugar. Que no lo duden.

PEPERUFO.