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    martes, 25 de abril de 2006

    EL HISTÉRISMO ELECTORAL DEL PARTIDO POPULAR.












    La derecha pide la interrupción del proceso de paz.


    El frenazo tendría que ver más con los sondeos desfavorables para el PP que con el fondo de la cuestión.


    El presidente navarro, Miguel Sanz, ha pedido que se interrumpa el proceso de paz tras los lamentables sucesos de Barañain y Getxo. ¿Por qué Sanz no abrió la boca en idéntico sentido al actual cuando tras el inicio de la tregua de ETA, siendo presidente José María Aznar, se continuaban cometiendo cada dos por tres delitos callejeros por parte de la Kale Borroka –sumaron más de mil-, mientras los empresarios de su Comunidad y los de Euskadi seguían recibiendo cartas amenazadoras de ETA recordándoles que –si no querían tener problemas- pagaran el denominado impuesto revolucionario?


    Eran otros tiempos, claro. No tan lejanos, sin embargo. El 16 de noviembre de 1999, Mayor Oreja, ministro del Interior entonces, declaraba al diario Le Monde: “Estamos dispuestos a dialogar (…) dispuestos a hacer todo sin exigencia previa, sin ni siquiera discutir la entrega de armas, justo por la paz”. Y añadía que ETA mantenía en esos momentos “su trabajo habitual”. Es decir “roba vehículos a diario, recaba información, envía cartas a empresarios (…) para reclamar el impuesto revolucionario (sic)”

    Ramírez, desilusionado

    ¿Ignoraba Sanz por aquellas fechas en qué consistía “el trabajo habitual” de ETA? No parece probable que el presidente navarro no supiera el alcance de ese “trabajo”. Pero lo cierto es que él no abrió la boca para oponerse a la estrategia de Aznar en relación a la tregua decretada por ETA. No lo hizo Sanz ni lo hizo nadie de cuantos ahora, después de lo de Barañain y Getxo, exigen paralizar el proceso de paz. O manifiestan –como ha hecho esta noche Pedro J. Ramírez en 59 segundos de TVE- que no están ilusionados con el alto el fuego permanente. ¿Se debió de apagar la ilusión a Ramírez poco después de haber publicado en su periódico artículos de entusiasmo, casi de euforia, saludando al presidente pacificador Aznar López?

    Aval implícito de ETA

    No se trata de medir los grados de ilusión –siempre subjetivos- de unos u otros. Ni de reclamar que Batasuna incorpore de pronto a sus esquemas los esquemas tradicionales del Estado de Derecho. Si los hubiesen asumido, haría años que se habría acabado la pesadilla de terror y muerte en Euskadi y en el resto de España. El problema es que hasta el presente jamás Batasuna y, menos aún, ETA han hecho suyos tales esquemas democráticos. Exactamente por eso estamos donde estamos, entre la esperanza y la cautela, aunque con el aval implícito – sin precedentes- de tres años consecutivos sin un solo asesinado.

    El camino que todos deseamos

    Batasuna ayer tarde, por boca de Joseba Permach, calificó de “hechos muy graves” los actos de violencia callejera de este pasado fin de semana. Y subrayó que Batasuna desea que “desaparezcan todas las expresiones de violencia”. Agregó Permach consideraciones no admisibles -aunque entendibles para consumo interno frente a sus seguidores- en el contexto en el que nos encontramos, respecto al comportamiento del Estado sobre detenciones y procedimientos judiciales aplicados a etarras y a ciertos dirigentes batasunos. Pero el Gobierno ha tomado nota y el secretario de Estado de Comunicación, Fernando Moraleda, ha señalado que Batasuna recorre “el camino que todos deseamos.”

    ¿En la buena dirección?

    No tardará mucho en comprobarse si ETA/Batasuna circulan, en efecto, atentos a la buena dirección. Pero del mismo modo que aún es prematuro hablar de absolución respecto a un mundo que ha hecho de la violencia su instrumento principal de actividad política, también lo es que -a los primeros tropezones de un recorrido que, sin duda, será largo y complicado- se alcen voces de la derecha, política y mediática, exigiendo a Zapatero aquello que -multiplicado por cien como mínimo- aceptaron antes de Aznar y sin chistar.

    Ocho puntos de ventaja

    Hay fundamentos sólidos para pensar que las prisas de algunos por frenar el proceso de paz tienen más que ver con los últimos datos de la encuesta del Instituto Opina para la SER –ocho puntos de ventaja ya del PSOE sobre el PP- que con la cuestión de fondo que ahora miso se dilucida en España. Cuestión que afecta nada menos que al futuro de todos los españoles, a la convivencia en paz y a la libertad.

    Enric Sopena

    4 comentarios:

    Anónimo dijo...

    ALGUNOS ESTAN CRUZANDO LOS DEDOS PARA QUE NO SALGA ADELANTE EL PROCESO DE PAZ.

    QUE ASCO!

    Yukio Seki F1 dijo...

    estais locos, además de remate.

    Yukio Seki F1 dijo...

    estais locos, además de remate.

    Anónimo dijo...

    Las imágenes dicen más q muchas palabras.

    ¿El peperufo Rajoy con helicóptero en Google Earth?
    http://img280.imageshack.us/img280/8080/mostoles
    rajoyhelicoptero24tx.jpg

    Vivo con tu madre
    http://www.youtube.com/watch?v=UaL9XAucASA